sábado, 22 de octubre de 2011

Esta noche fría,
Esta noche sin amor, sin caricias,

Esta noche yerma
(sin alcohol siquiera)
Esta noche de dudas, como fantasmas rondando mi cabeza
Esta noche de soledad, en la cual mi cama ha sido ocupada por tu ausencia

Esta noche donde las estrellas se ríen de mi,
Donde no encuentro refugio

Donde me siento derrotado
Esta noche de tristeza casi palpable…

Que me agobia

Que me sumerge en la oscuridad

Que me asusta
Que se me hace interminable

Que se me hace insoportable.



Mallorca, Febrero de 1988



España era entonces,
Una canción de Serrat y una cinta de Eugenio,

Un poster de toros con mi nombre impreso
(de los que se venden frente al museo del Prado)

Luego lo supe…
España era también, una parte a descubrir de la familia

Eran las raíces…
Una foto adolescente de una prima lejana colgada en mi cuarto

Era Felipe y el Psoe, y las pegatinas (calcomanías entonces) de las campañas anti-otan…

…te podría contar, que está quemándose mi último leño en el hogar…

Sobre los campos, llueve…

Mallorca, Febrero de 1992

lunes, 17 de octubre de 2011




Crecemos…

Irremediablemente crecemos…

Y nos hacemos maleables

Ya casi nada nos asombra

Entonces, ya somos mayores,

Fingimos hasta en la cama, teatralizando orgasmos

Nos ponemos serios…

(también nos ponemos corbata)

Sabemos que se puede hacer

(Y que está prohibido…)

Mutilamos nuestros sentidos…

Tenemos piso, coche y una cuenta en el corte ingles

Somos ciudadanos respetables (y respetuosos)

No escupimos en el suelo, ni nos emborrachamos más de lo debido…

Somos seres realizados…

Y entonces…

Por qué a veces, nos sorprende la madrugada llorando en silencio…?

(Por no despertar a los vecinos)



Madrid, mayo 86

viernes, 14 de octubre de 2011

Los otros continentes



De ciertas aventuras, que se desarrollan en Europa  meridional y África del Norte …



Para las fiestas de su  primer año europeo,  primera  navidad de invierno, Marcelo y Ana,  colegas sudacas ex compañeros de facultad, le invitaron a pasar el capo d´ ano, en Torino, aquella ciudad tan elegante del  Piamonte. La idea era una cena con varios amigos, oriundos de distintos sitios, en su mayoría  bijuteros, (Marcelo y Ana lo eran anque), para la cual, cada uno aportaría productos tradicionales de sus lugares de residencia, en su caso, procedente de España, y por un tema presupuestario, eligió turrones de Alicante, y fue así, que en la cena de nochebuena, compartieron champagne francés, vinos y panettones italianos, alrededor de  un tradicional pavo relleno, a cargo de los anfitriones.  

Se embarcó, en el puerto de Barcelona, en un crucero con destino al mítico fondeadero de  Génova, desde donde, por tren, llegaría a Torino.  Cabe aclarar, que además del turrón, Marcelo le pidió una chinita de hachís del moro, sugerencia que acepto, demostrando una inconciencia típicamente veinteañera… ( esto desde su perspectiva cincuentona actual)

Al atardecer, en la cubierta, abrigados contra el frio viento del norte, en pleno mare nostrum, se armó un corro, en el cual, alemanes, ingleses, italianos y argentinos cantaron, contaron chistes y fumaron del humo del olvido de los griegos, en una seductora, exótica y divertida comunión…allí lo conoció, entre otros, a Luigi, un tano del sur, que viajaba con su novia, vendiendo corbatas y perfumes de contrabando.

Al amanecer se recortó la figura del puerto, una bahía inmensa delimitada por una paisaje que le recordó por un momento, a los morros brasileros.

Bajó por la pasarela, rumbo a la inspección de la aduana…al pasar junto a un oficial de la policía con un perro, reparo en el uniforme de los vigili, con sus sacones de cuero negro largos y sus botas relucientes, le recordaba demasiado a la Italia fascista, habría que proponer un cambio de look caviló entonces…

Fue mientras pensaba aquellas boludeces, cuando escucho la voz de alto, mientras el perro cabrón, no dejaba de olfatearle el bolsillo trasero del pantalón, donde estaba su billetera, el oficial, entonces, le pregunto si tenía hachís, a lo cual respondió, con una pelotudez casi absoluta, que el perro estaba equivocado, ya que había fumado a bordo … bla bla, a lo cual el oficial, con un cierto gesto de a mí no me jodas pendejo, le contesto, muy amablemente, que era imposible que el perro se equivocara, mientras el pichicho, ya casi en estado de abstinencia, no separaba su húmeda y alcahueta nariz de su, a esa altura de los acontecimientos, fruncido culo…

Vencido por la evidencia confeso y entrego la chinita, que luego, una vez que escribían la denuncia, resulto pesar  uno virgola cuatro grammi, y como a confesión de partes, relevo de pruebas, lo pusieron a disposición de un juez conduciéndolo a su despacho, dentro de un edifico con amplias galerías porticadas, el magistrado resulto ser, un viejito muy cachondo, le paso una comunicación con el consulado argentino, desde el cual, un funcionario lo cago a pedos en nombre de la decencia y el prestigio de los argentinos, lo cual, con la perspectiva de los años, veía un poco exagerado, no les parece?

Su señoría, fue el siguiente a cagarlo a pedos, tu sei un stronzo! Le decía, mientras se dirigía a una gran ventana abierta que dominaba la ciudad…el problema no era la tenencia…. Incluso le dijo que en la plaza frente al edificio podía comprar…el problema era el tráfico de un país a otro…pero considerando la cantidad y etc etc quedaba libre, acto seguido y en un nuevo episodio de pelotudez le pregunto si ahora que estaba todo aclarado se le iba a reintegrar el hachís incautado, a lo cual el juez señalo la puerta, sin esgrimir parole.

Fuera del edificio estaban Luigi y so novia, se abrazaron y decidieron ir a festejar el final feliz de aquel incidente, a alguna trattoria del puerto donde sirvieran, la especialidad genovesa, unos buenos spaghettis al pesto, rociados con un generoso chianti.

A la tarde se despidieron y partió rumbo a Torino en tren.

hasta siempre capitan

Un día de  primavera, incierta, que comenzó con cielo cubierto,  y que, con el correr de las horas el viento del sur, una vez más, se encargó de desflecar,  fue aquel día en el cual, el capitán dejo su guardia, satisfecho por el rumbo logrado en aquella, su larga e intensa singladura…

Aquel día,  le  canto al oído a “la dotora”, esa canción de cuna que ella le  solía cantar, que hablaba de nenes lindos y nenes feos, que querían pasear…

La viejita, entonces, dejo su visión lejana, profunda…y lentamente movió la cabeza mientras sus ojos claros se fueron abriendo, grandes con una expresión de  ternura infinita que se completaba con una sonrisa calma…sus ojos buscaron los suyos, decididamente…aquel día, su madre, le miro directamente al  alma para brindarle una vez más, consuelo y paz, infinita paz…



La Plata, 13 de octubre de  2011



Afuera sopla el viento…y recuerdo…cuantas veces, viejo, sentimos juntos aquella sensación,

Cuantas veces sentí, junto a vos, este rugido…

Me enseñaste, entonces, a no tenerle miedo, simplemente respeto (decías)

Cuantas veces, viejo, tiempo después, en otras noches de tormenta, cómo esta de hoy (como aquellas de siempre) pensé en todo aquello, aferrado a la caña de un velero, mirando otras estrellas, tratando de fijarlas entre los obenques, como vos me enseñaste,

Pero solo uno quince o veinte minutos (decías)

Afuera sopla el viento y recuerdo…

Gracias papi por enseñarme a navegar…gracias mami por aguantarnos!!!



Palma de Mallorca, Diciembre de 1991


lunes, 3 de octubre de 2011

20N

Los acontecimientos ( no quería ser pesimista) pero en los últimos tiempos se habían precipitado un pelín, la historia otra vez como en un espiral borgiano se repetia, el huevo de la serpiente volvía a incubarse, lo presentía, mañana es 20 de noviembre aniversario de la muerte de Franco, por los medios de comunicación, la cruz roja recomienda a la gente “de color” ( como si el blanco no lo fuera) no circular por el centro de Madrid…las calles, a veces, se parecen demasiado a la selva, pensó…

La idiotez vomitada por los medios de comunicación masivos ha dado sus frutos

Cuantas toneladas de violencia asimilamos?

Cuantos coches deportivos nunca conduciremos?

Cuantos viajes a sitios exóticos nunca disfrutaremos?

Cuantas fragancias francesas jamás nadie olerá en nosotros?

Cuantas tarjetas de crédito jamás podremos utilizar?

Frustración y deseo, profunda frustración…

El chivo expiatorio no tarda en aparecer en estos casos

Los acontecimientos, insisto, se estaban precipitando…

Mallorca, Noviembre 1991